Radicales K planean disputar la conducción nacional de la UCR

Tiempo Argentino / Zetavisión / Z Inter Press

Tras el último triunfo electoral, los gobernadores y dirigentes afines al kirchnerismo miran con buenos ojos la necesidad de tener el sello de la UCR en sus manos. Los puntos a favor y en contra de esta posibilidad.

El exitoso resultado de las elecciones del domingo, permitió a los radicales K sostener entre sus objetivos la conducción del partido y, tanto el gobernador Arturo Colombi como el vicepresidente electo Julio Cobos, ya adelantaron que será un tema clave en la agenda para la construcción del poder electoral.

Los radicales K tienen tiempo suficiente para planear “la mejor estrategia” debido a que 2008 no es electoral y todo indica que se ocuparán del caso los doce meses del año que viene.

A favor, tienen legitimada por el voto popular la decisión de haber aceptado la alianza con el presidente Néstor Kirchner, en el marco de la llamada concertación plural, con el aplastante triunfo de Cristina Fernández y Cobos, contra una UCR opositora que con su fórmula Roberto Lavagna - Gerardo Morales no pudo superar a Elisa Carrió que, sin estructuras partidarias tradicionales, les quitó el segundo lugar.

La paliza electoral es el dato más alentador para los K y desde aquí en adelante el reproche será el siguiente: “Gracias a la concertación K, los radicales volvemos a tener un vicepresidente”.

Pero en contra tienen los fallos judiciales que avalaron la intervención partidaria dispuesta por el Comité que preside Morales en todos los distritos K, como el caso de Corrientes. La Justicia entendió que la cúpula nacional tiene la facultad de tomar tal medida en caso de que sus órdenes de internas (las de no apoyar a Lavagna en este caso), no sean acatadas.

Otro punto en contra es que Cobos, el vicepresidente electo y saliente gobernador de Mendoza, deberá combatir en la Justicia su reciente expulsión “de por vida” del partido.
La intervención partidaria, resuelta por doce meses, debería cesar a mediados de 2008 y es para ese momento en el que los K podrían prepararse: el Comité Nacional deberá convocar a internas para normalizar las conducciones en los distritos.

Con esto, se supone que las estrategias para buscar el control del sello partidario de la tradicional lista 3 serán más políticas que judiciales.

Además de Cobos y Colombi, pelearán por el liderazgo de ese espacio otros gobernadores que ganaron en sus respectivas provincias como Miguel Saiz de Río Negro y Gerardo Zamora de Santiago del Estero.

Y la lista sigue con decenas de intendentes, sobre todo en la provincia de Buenos Aires.
El domingo, tras festejar el triunfo de Cristina en su provincia, el gobernador correntino advirtió que “ahora el gran desafío” de ese sector del oficialismo es recuperar el partido en todos los distritos intervenidos por el Comité Nacional.

Morales ya les contestó

Pese a haber perdido por una gran diferencia las elecciones del domingo, el presidente del Comité Nacional de la UCR, Gerardo Morales, no bajó el tono de la disputa por la conducción de la fuerza que mantiene con los radicales kirchneristas. No se mostró dispuesto a dialogar y descartó ayer toda posibilidad de acuerdo con los radicales K, y sostuvo que “tiene que haber un quiebre con quienes apoyan el proyecto político del oficialismo”.

Morales, quien cayó derrotado en las elecciones del domingo cuando se ubicó tercer como candidato a vicepresidente, adelantó que convocó para mañana en Capital Federal a todos los legisladores “radicales puros” electos, para analizar la situación partidaria.

Respecto de los dirigentes radicales que se sumaron al kirchnerismo, consideró que “habrá que convocar a la Convención Nacional” de la UCR –máximo órgano partidario– para tomar una resolución “definitiva e inflexible” sobre ellos.

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