El mundo llora a Mario de Benedetti : "Después de todo, la muerte es sólo un síntoma de que hubo vida"
Tiempo Argentino / Zetavisión / Zeta Inter Press
El escritor uruguayo Mario Benedetti, cuya obra ha sido considerada como la conciencia poética de Latinoamérica, murió ayer en su casa de Montevideo a la edad de 88 años, tres años después de que “empezara a morir”, como él mismo dijo tras perder al amor de su vida, su esposa Luz, con quien compartió la libertad y el destierro, huyendo de la dictadura en su país.
Benedetti arrastraba un delicado estado de salud y había sido ingresado cuatro veces en el último año. La última vez fue el pasado día 6, cuando recibió el alta tras 12 días ingresado por una dolencia intestinal.
“La literatura, ya no la uruguaya, sino la de habla hispana y la de todo el mundo, pierde a una figura de primer nivel, y yo pierdo a mi hermano”, declaró tras conocer la noticia uno de sus más cercanos amigos y colaboradores, el también escritor uruguayo Mauricio Ronsencof, con quien compartió redacción en el semanario Marcha e ideas políticas “entre otras muchas cosas”.
Los restos del poeta serán velados desde hoy en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo y está previsto que participen en el sepelio el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, y el vicepresidente de la república y presidente de la Asamblea General, Rodolfo Nin Novoa.
“Si Mario no dejó instrucciones en contrario, el martes 19 sus restos serán depositados en el Panteón Nacional”, agregó Rosencof, director de Cultura del gobierno local de Montevideo.
Autor prolífico. Siempre se definió como poeta, pero su prolífico legado, con más de 80 obras, dejó ensayos, guiones de cine, novelas, como La tregua y cuentos como Montevideanos o Despistes y franquezas, pero sobre todo poemarios como Sólo mientras tanto o Viento del exilio. Sus obras estaban marcadas por el amor, la solidaridad y, a medida que pasaba el tiempo, por la muerte.
Además, cantantes como Joan Manuel Serrat, Daniel Viglietti, Rosa León, Pedro Guerra y Nacha Guevara, entre otros, pusieron música a sus versos.
Su última obra publicada, el poemario Testigo de uno mismo, fue presentada en agosto del año pasado. En esta obra presentía ya el final de sus días, a la vez que insistía en la soledad sin su amada Luz, su esposa, fallecida en 2006 tras 60 años de matrimonio.
Antes de su último ingreso, Benedetti estaba trabajando en un nuevo libro de poesía cuyo título provisional es “Biografía para encontrarme”.
El escritor uruguayo fue galardonado con el premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (1999), el Premio Iberoamericano José Martí (2001) y el Premio Internacional Menéndez Pelayo (2005), entre otros.
"Un Mito"
La biógrafa de Mario Benedetti, Hortensia Campanella, recordó el compromiso social y la coherencia de alguien que creyó “en la vida y en el amor, en la ética y en todas esas cosas tan fuera de moda”.
“Él siempre dijo que se sentía más poeta que otra cosa”, señaló cuando presentó hace unos meses el libro “Mario Benedetti. Un mito discretísimo”, con el que trazó la trayectoria de uno de los mitos de la literatura hispanoamericana del siglo XX y quizá la conciencia poética de todo un continente.
Esa poesía se convirtió en el único báculo para afrontar sus últimos años, tras la muerte en 2006 de su esposa, Luz López, su compañera desde hacía más de seis décadas y su mejor crítico. La de Benedetti ha sido “una vida que ha ido persiguiendo la utopía, el compromiso social y que por eso mismo ha encontrado en la poesía su mejor expresión, o por lo menos, la más querida, la más auténtica”, señaló.
Más Información : Hacer click sobre el título
tiempoargentino@gmail.com
<< Página Principal