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martes, 17 de junio de 2008

Tiempo Argentino / Zetavisión / Z Inter Press

Con una sonrisa y tirando besos ante una audiencia conformada por periodistas y por el riñón del peronismo que comanda, el ex presidente Néstor Kirchner volvió al primer plano de la escena política para sostener a su esposa Cristina Fernández y construir su relato de la realidad, "diferente al que dan los medios de comunicación". Sin vueltas, tal es su estilo, empleó sus primeras palabras para confirmar la convocatoria al acto del miércoles en la Plaza de Mayo "en apoyo de la democracia y de la presidenta".



La comparecencia, armada en el transcurso de una jornada plagada de rumores y movimientos dentro del peronismo, con celulares ardiendo, puso fin a una creciente expectativa producto de algunos desmarques dentro del oficialismo por el conflicto abierto con el campo. Como presidente, Kirchner nunca dio una conferencia de prensa. En un hecho inédito, estuvo una hora frente a los medios e incluso extendió el turno de preguntas pactado. Desde el micrófono, acusó de "extorsión" a las organizaciones agropecuarias.

El laberinto en el que está encerrada Argentina comenzó el 11 de marzo con el rechazo de los productores agrarios al aumento de los impuestos a la soja. 98 días más tarde el desmadre del conflicto abrió algunas grietas en el peronismo-- Kirchner las negó-y enrareció el clima político tras una cacerolada masiva la noche del lunes.

Fuentes del kirchnerismo aseguraron que el ex presidente dedicó la mañana a cerrar filas con el aparato peronista. El resultado se verá en la foto del acto del miércoles, convocada en las publicidades con el lema "Todos a la Plaza" en contra de los que "desabastecen". A cambio del apoyo, señaló la misma fuente, el Partido Justicialista le reclamó la cabeza del ex piquetero Luis D´Elía, devenido en vocero y fuerza de choque del peronismo.

Con el aparato encolumnado, demostrado en la foto con el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, y el líder de la CGT, Hugo Moyano, y algunos funcionarios del Gobierno, el ex presidente salió a ratificar el rumbo del país y las decisiones tomadas "por Cristina".


"No creo que Duhalde esté detrás de un golpe"


Luego de ratificar la realización del acto del miércoles, pese al anunciado faltazo del gobernador de Chubut, Mario Das Neves, y del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, el ex presidente dio cuenta de su relato de la realidad. Repasó los logros económicos de su gestión, continuada por su esposa, y acusó a algunos sectores de querer "desestabilizar" al "Gobierno nacional y popular". Responsabilizó de ello a los ruralistas, quienes con "el apoyo del Grupo Clarín, el diario La Nación y los grandes medios argentinos", ofrecieron un relato "parcial" de la realidad.

Sin embargo, los dos gestos más importantes de la conferencia de prensa no pasaron por ahí. Por un lado, el ex presidente se desmarcó de las palabras del ex piquetero Luis D´Elía, quien llamó el lunes a armarse en defensa de la patria tal y como autoriza la constitución, y acusó al ex presidente Eduardo Duhalde de estar detrás de un "golpe de estado económico".

"Ustedes más que nadie saben que D´Elía y yo no estamos de acuerdo en todo", comenzó Kirchner. Se refería a la diferencia que tuvo con el ex piquetero en torno a la investigación de funcionarios iraníes por la voladura de la AMIA y de la Embajada de Israel. "No, no creo que Duhalde, con quien tengo mis diferencias, esté detrás de ningún golpe", respondió. Acabó así, al menos de momento, con los días de D´Elía como vocero de hecho del Gobierno, un pedido expresado por el gobernador Das Neves y otros referentes del peronismo que criticaron la convocatoria hecha por el ex piquetero, que no responde al aparato peronista.

Lo cierto es que el vocero de Duhalde eligió el escenario de la mañana del martes para notificar públicamente el regreso del cacique a la política. Duhalde, dijo, está armando una "corriente interna dentro del justicialismo" a "pedido de dirigentes e intendentes" del partido. "Se dio cuenta de que tiene una responsabilidad que ya no puede eludir", agregó Verdi.

Doble rasero mediático


El capítulo de la prensa ocupó el párrafo más extenso del discurso de Néstor Kirchner. Buscó poner en evidencia la doble lectura de la realidad que hacen los medios según quienes protestan. "Cuando eran los compañeros que se quedaron sin trabajo y que cortaban las calles, me pedían tolerancia cero, que los metiera preso. Cuando son los del campo los que cortan las rutas y desabastecen, resulta que es democrático. El mensaje es ellos sí, nosotros no- bramó- Eso es hipocresía señores".

Según el relato de Kirchner, "todos los sectores ligados a la represión estatal" de la última dictadura (1976-1983) "dan apoyo logístico a la protesta agraria" porque no toleran la pluralidad de ideas, una crítica repetida por la oposición a Kirchner. No se trata de un solo sector para el ex gobernante, sino de viejos resabios. "Me encanta este nacimiento de una nueva derecha. Pero que nazca en serio una nueva derecha. Hay sectores que siguen sin entender lo que es la democracia", agregó.

Aunque fuera sobre alfileres, el tiempo dirá, el acuerdo de Kirchner con el aparato peronista sirvió para una comparecencia en la que Kirchner se mostró fortalecido luego de un día plagado de rumores y de incertidumbre.

Al cierre de esta edición, con el homenaje a las víctimas del bombardeo a la Plaza de Mayo del fallido golpe de 1955 a Juan Domingo Perón como telón de fondo, la presidenta Cristina Fernández ofrecía su tercer discurso por cadena nacional en un mes. Se esperaba una nueva convocatoria al diálogo con el sector ruralista.

Kirchner, en cinco frases

Apoyo a la presidenta

"El acto no es contra nadie. Tenemos todo el derecho del mundo a expresarnos en defensa de la democracia, la convivencia, la solidaridad, la paz y en apoyo de la presidenta."

Solidaridad

"Las retenciones no son una medida fiscalista. Tiende a la redistribución del ingreso y a que en la mesa de ustedes, los argentinos, para que los alimentos que ustedes comen, no sean a precios internacionales. Estamos defendiendo la mesa de los argentinos. Es una medida solidaria. Si sacamos las retenciones van a perder lo que ganaron en estos 6 años".

Paños fríos

"Cobos no hace más que decir lo que pensamos nosotros.", dijo, en referencia al llamado del vicepresidente, de extracción radical, de dirimir el conflicto mediante el diálogo en el Congreso Nacional. Dentro de la Casa Rosada había caído como un balde de agua fría el desmarque del ex gobernador de Mendoza.

Moda

"A mí me criticaban por mis mocasines gastados y por mis trajes. Ahora a Cristina la critican por vestirse bien. ¿Quién lo entiende?", fue una de las humoradas cuando arremetió contra la prensa.

Una anécdota con el principal adversario de la protesta agraria

"Una vez llegué a Gualeguaychú. Entonces viene un dirigente que me reta. Después otro que me abraza y me felicita. Eran igualitos. Pensé, este muchacho está loco. Hasta que me aclararon que se trataba de gemelos. No tengo problemas con (Alfredo) De Angeli. Me parece que está equivocado y que debería liberar las rutas. Estoy en desacuerdo con la metodología."
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